Al grito de “YO SOY” comenzaba hoy la misa del envío, presentando a todos los grupos que forman nuestra comunidad.
En el ofertorio, cada grupo de la comunidad ofrece algo que les represente llevando los catequistas unas semillas, el grupo de liturgia un cuadro que representa la misa del envío, el coro un cancionero, los grupos bíblicos una biblia, y cerró las ofrendas el pan y el vino.
Después de una celebración llena de símbolos y cantos misioneros se cierra la eucaristía con estas palabras:”Obedientes al mandato de Cristo y confiados en la gracia del Espíritu, Id y anunciad el Evangelio a vuestros hermanos en nombre de la Iglesia”…
Y así en marcha iré cantando
por calles predicando
lo bello que es tu amor
Señor tengo alma misionera
condúceme a la tierra
que tenga sed de ti
Después de esta pequeña entrada llegó el momento de pedir perdón donde los catequistas de los grupos de postcomunión y confirmación nos representaron todas y cada una de las veces que decimos la palabra PERDÓN por cosas sin importancia y, en las cosas que realmente lo merecen, nos es más difícil decirla.
Durante la homilía, nuestro sacerdote, Salvador, nos da una catequesis sobre como Jesús al colocarse siempre de parte de los débiles, mujeres y niños nos descubre que nadie es inferior a nadie, que todos somos iguales, y que todos tenemos una misión: “Anunciar el mensaje de Jesús porque todos somos misioneros”. Por eso, en este instante se escenifica el momento en que somos enviados, niños y adultos, todos necesarios para el Reino de Dios.
Después de una celebración llena de símbolos y cantos misioneros se cierra la eucaristía con estas palabras:”Obedientes al mandato de Cristo y confiados en la gracia del Espíritu, Id y anunciad el Evangelio a vuestros hermanos en nombre de la Iglesia”…
Porque todos somos MISIONEROS…
todos formamos parte de la Parroquia VIRGEN DEL ALBA
Alma misionera
Señor, toma mi vida nueva
antes de que la espera
desgaste años en mi
estoy dispuesta a lo que quieras
no importa lo que sea
tu llámame a servir
Llévame donde los hombres
necesiten tus palabras
necesiten mis ganas de vivir
donde falte la esperanza
donde falte la alegría
simplemente por no saber de ti
Te doy mi corazón sincero
para gritar sin miedo
Tu grandeza, Señor
Tendré mis manos sin cansancio
tu historia entre los labios
y fuerza en la oración
antes de que la espera
desgaste años en mi
estoy dispuesta a lo que quieras
no importa lo que sea
tu llámame a servir
Llévame donde los hombres
necesiten tus palabras
necesiten mis ganas de vivir
donde falte la esperanza
donde falte la alegría
simplemente por no saber de ti
Te doy mi corazón sincero
para gritar sin miedo
Tu grandeza, Señor
Tendré mis manos sin cansancio
tu historia entre los labios
y fuerza en la oración
Llévame donde los hombres
necesiten tus palabras
necesiten mis ganas de vivir
donde falte la esperanza
donde falte la alegría
simplemente por no saber de ti
necesiten tus palabras
necesiten mis ganas de vivir
donde falte la esperanza
donde falte la alegría
simplemente por no saber de ti
Y así en marcha iré cantando
por calles predicando
lo bello que es tu amor
Señor tengo alma misionera
condúceme a la tierra
que tenga sed de ti
Escrito por: Lorena González
(Grupo de Comunicación)
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